Bajo el lema de Trabajar duro no asegura el éxito, pero no hacerlo lleva al fracaso, el Grupo Barcia lleva años continuados de crecimiento constante, en una corporación actual liderada por Jorge Barcia, en la que destacan las empresas SMG Iberia y Cabager.

Expertos en el sector de la energía, la familia Barcia lleva desarrollando su trayectoria profesional en esta rama desde hace más de 50 años, distribuyendo primero y construyendo
después, soluciones autónomas de generación eléctrica a través de las compañías AGALSA, CYMASA, GAHELIOS y ahora CABAGER y SMG IBERIA.

Para entender el grupo actual, líder en el sector tras años de crecimiento constante, se debe retroceder en el tiempo hasta 1966, cuando Don Francisco Barcia, de formación técnica y amplia experiencia en el ámbito de la electricidad industrial, regresa a su Coruña natal para continuar con su labor profesional.

Esta estancia será el germen de la marca, ya que nueve años más tarde dio el salto creando su propia empresa, denominada AGALSA (Aguirena Galicia SA), un almacén de material eléctrico dedicado a la comercialización de productos técnicos o que necesitaban soporte especializado, algo no muy común por aquel entonces.

Tras varios años de crecimiento continuado, la entidad explora una nueva línea de negocio: la comercialización de grupos electrógenos, que rápidamente pasan a ser fabricados por ellos mismos, dada la demanda de personalización que los clientes requerían. Así nace CYMASA (Construcciones y Montajes Agalsa) en el año 1988, una aventura en la que tanto su esposa Sara, como sus hijos Francisco, Sara y Jorge, le acompañan a pie de fábrica.

La experiencia resultaba exitosa, porque a pesar del crecimiento elevado de CYMASA, posicionándose como líder absoluta en el diseño y fabricación de electrógenos especiales, la línea de negocio de AGALSA se había mantenido en el mercado.

El legado pasa a Jorge Barcia

A partir del año 1996, Jorge Barcia asume la gerencia, la cual mantiene hasta 2003, tras un crecimiento sostenido e imparable, con filiales en diferentes continentes: Europa, América, Asia y África. En este periplo, el grupo, debido a la creciente demanda de servicios de mantenimiento, crea en el año 2000 la compañía CABAGER, que cubre el hueco del alquiler.

SMG Iberia, sinónimo de confianza en Grupos Electrógenos

Experiencia, talento humano, ágil capacidad de respuesta y mucha ilusión en cada uno de sus proyectos constituyen el gran capital de SMG IBERIA, S.L., toda una referencia en el ámbito de la fabricación, comercialización, mantenimiento y reparación de generadores eléctricos, concebidos para satisfacer cualquiera de las necesidades de quien precisa un suministro energético continuo, limpio, eficiente y garantizado. Siempre, comprometidos con el asesoramiento personalizado y el servicio técnico al cliente.

SMG IBERIA, S.L. es distribuidor oficial del líder mundial en fabricación de grupos electrógenos: FG WILSON y destaca por su experiencia en el suministro de generadores diésel y de gas, con la mejor calidad y garantía del mercado.

Mención aparte merece su personal altamente cualificado que, junto a la aplicación de tecnología punta, asegura al cien por cien el desarrollo completo de cualquier proyecto planteado por sus clientes, independientemente de su dificultad o dimensiones.

La gama de productos de la marca incluye grupos electrógenos estacionarios e insonorizados con potencias que van desde 1 KVA hasta 2.500 KVA, proporcionando un suministro eléctrico continuo o de emergencia, diseñados para cubrir las más diversas demandas. Equipos que, además, poseen un amplio abanico de opciones para trabajar en cualquier tipo
de localizaciones y en las condiciones ambientales más adversas.

Con un servicio postventa ágil, profesional y proactivo, SMG IBERIA destaca por la calidad de sus mantenimientos y reparaciones. Y gracias a su red logística de ámbito nacional, que incluye una completa flota de vehículos totalmente equipados para resolver cualquier incidencia, así como la disposición de complementos básicos y opcionales, la marca constituye un sinónimo de confianza más que contrastada, tanto en el sector industrial como particular.